Hoy ya llevo una semana sin encontrar hueco para contar nuestras andanzas por estas tierras, con lo que si no quiero que esto sea como la historia interminable, seré breve en contar lo más importante que hemos hecho esta última semana que ya casi va a completar el mes.
El viernes pasado, que es el primer día que dejé sin contar, lo más destacable que hicimos fue ver el famosisísimo cartel de Hollywood. Aunque parezca increíble, todavía no lo habíamos visto, ni en el tiempo que llevábamos aquí y tampoco cuando estuvimos el verano pasado, así que ya teníamos ganas de quitarnos esta espinita. Además, en la peli de Rock of Ages, también aparece de forma notable, con lo que todavía nos incrementó el interés. Parece que los de Google Maps tampoco han estado, porque las indicaciones para llegar a él nos las dio mal. Con todo lo que nos costó verlo, la verdad es que cuando lo conseguimos ver por primera vez nos hizo bastante ilusión. Luego tratamos de acercarnos a él y lo máximo que conseguimos fue ir a una especie de mirador, en la que el cartel estaba relativamente cerca, pero no al lado y además, como siempre, se nos estaba haciendo de noche. Tendremos que repetir la visita para ver si lo vemos desde más cerca, pero ya sin prisa...
Tras la visita al cartel, nos tomamos una cervecita por la zona de 'Los Feliz' (así son, utilizan el español, pero a veces se equivocan un poco en las construcciones), y de vuelta a casita.
El sábado, 23 de junio, jugaba España los cuartos de final de la Euro contra Francia. Lo vimos en casita Sandra y yo, con el habitual foro de whatsapp de futboleros. Ganó España, 2-0, bastante solvente y a semis. Increíble lo que ha cambiado el cuento con la selección... En toda mi vida no había visto jugar más que unas semifinales a España y en estos cuatro años, no ha faltado a ninguna. Creo que España no tuvo suerte en las grandes competiciones, y ahora se nos está haciendo un poco de justicia.
Tras el partido, como nuestra querida Ada no tenía pienso, nos fuimos a visitar el sitio que nos recomendó aquella locuela que relaté del día que operamos a la perra por primera vez, Global Pet Outlet.
La verdad que el sitio estaba muy bien, muy completo y con precios bastante buenos. ¡Gracias locuela!
Después de las compras, decidimos tomarnos el aperitivo en nuestro querido Tattle Tale, y como de aperitivo, ya hemos dicho que aquí nada, decidimos darnos el primer homenaje de comida basura, en el Jack in the Box, que lo tenemos cruzando la calle.
Tras una conversación un poco surrealista con la camarera que nos atiende en inglés, en la que nos pregunta si los españoles entendemos a los mexicanos (cuando hablan), cogemos unas hamburguesas para llevar a Camelot. Las hamburguesas están muy buenas, pero como en todo sitio de comida basura que se precie, estamos haciendo la digestión durante horas... y más horas.
Luego para acallar nuestras conciencias, bajamos un rato al gimnasio. Para finalizar el día decido visitar andando el CVS mientras bajo a Ada, para ver si me compro unas pastillas de leche de burra. Es tarde y ya ha cerrado :-(
El domingo, ya con la digestión de la hamburguesa terminada, medio veo el partido del día (Inglaterra - Italia) y tras una comida en casa, nos toca visitar un Home Depot. No lo he contado, pero, Sandra, que se está empezando a destacar por ser un poco rompilona, ayer se cargó la puerta de un armario, al cerrarla un poco (mucho) a lo bestia contra el saco de pienso, ha reventado las bisagras. En toda la casa hay un triste destornillador, así que hay ponerse manos a la obra para arreglar la puerta. Tras realizar las compras necesarias para reparar la puertecita nos volvemos a hacer el arreglo en cuestión.
Después decidimos dar una vuelta por Marina del Rey. Tras un paseito vespertino no muy largo por el paseo marítimo y el muelle, nos tomamos una cervecita en un bar bastante bullicioso de Venice, pero con buenos precios para lo que se tercia por aquí. Estamos bajo mínimos en la nevera y nos apañamos una cena con lo que podemos.
Llega el lunes ¡Hay que ir a la compra! Pero también hay que ir al veterinario. La mañana la dedico a seguir investigando si se puede llegar corriendo a la playa desde casa (y volver). Llego a la conclusión de que sí, pero que la carrera en cuestión será de unos 17 kms. Comparto el enlace de la carrera en donde se ve que me quedé como a 1,5 kms de la playa. Luego visitamos al Dr. Girgis, que con su peculiar inglés, nos dice que la perra va muy bien. Que sigamos con las friegas de carrillo y que volvamos la semana que viene.
Luego hacemos una comida tirando de no se qué existencias y por fin convenzo a Sandra de que necesitamos hacer compra. Vamos a un centro comercial nuevo, en el que de paso vamos a comprar un par de camisetas en Ross que es una tienda que nos han recomendado como barata rollo outlet. De hecho ya hemos estado antes en Culver City en otra pero en esa ocasión sólo compró Sandra. Me compro dos camisetas, una más para hacer deporte y unos calcetos y sí, ¡por fin llegamos al super!
Esta vez, para seguir probando, vamos a Ralphs, que lo hemos oído en la radio como que es muy barato. Hacemos la mega compra durante más de dos horas (esta vez nos gastamos más de 200$) pero por fin vamos a tener la nevera que no parezca un hospital robado. El balance de Ralphs es que está bien, pero no creemos que sea el más barato y no es el que más cerca nos pilla. Casi descartado.
Después para airearnos un poco, decidimos hacernos socios de un DVD club que hemos visto enfrente del veterinario, así que vamos dando un paseo con Ada hasta allí. El sitio lo lleva un oriental, que como no, es desconfiado y viendo que somos de fuera, nos pide un deposito para sacar pelis. Le decimos que sin problema y nos hacemos socios. Cogemos la de Safe House que no me acuerdo como se llamaba en español. Nos entretiene, pero no nos flipa (Por cierto, esta expresión, tiene probablemente su origen en 'flip out' que lo dicen bastante por aquí, que viene a ser 'volverse loco'. Es curioso que los primeros a los que se les oyó utilizarla era a los macarras. Tenemos unos jinchos de lo más internacional...)
El martes, Sandra está de antojitos y quiere comer pescado. La verdad es que aquí es difícil comerlo, ya que son unos flipaos (again) de la comida basura y de la carne, pero el pescado, para los acuarios.
Decidimos ir a Redondo Beach, que cuando estuvimos con Luis y Anj, nos enseñaron una pescadería. Aquí, los pescados, también hablan inglés, porque no hay ninguno reconocible (bueno, el salmón, el atún y el bacalao. De la lubina, dorada, merluza, pescadilla... ni rastro). Compramos uno que nos parece que tiene buena pinta y que el pescadero también nos recomienda, un Striped Bass, que debe ser pariente lejano de la Lubina.
Tras una cervecita por la zona, también en el mismo bar que conocíamos de los 88 grifos de cerveza, vamos a casa a cocinar el pescadito al horno. La verdad es que nos supo bueno. Era una extraña mezcla de dorada y trucha, pero estaba rico.
Por la tarde, me acerco a Sprouts a comprar cervezas y vino, que al día siguiente vamos a ver el partido de España en casa de Luis y luego voy a devolver la peli. Sandra mientras tanto, se ha ido a hacerse unas fotos para su curso de inglés que lo empieza la semana siguiente.
Llegamos al miércoles, día marcado por la semifinal de España contra Portugal. Subidón total cuando pasamos a la final, la tercera en cuatro años. ¡¡Increíbleeeeee!! Nos quedamos de barbacoa en casa de Luis y Anj y claro, se nos va un poco de las manos con la alegría, así que allí se nos hace de noche, speaking (a bad) english y vuelta a casa.
La noche la pasamos un poco regular y la mañana un poco resacosa, pero lo peor es la noticia de que la avería del coche de España, van a ser 600€, porque se le han roto cuarenta cosas ¡Joder! Bueno, está claro que desde el punto de vista económico, he arrancado un poco gafado. Hace un poco de calor y como tengo un poco de mal cuerpo, decido dar una carrera dando vueltas por el parque de Fox Hills, que como está enfrente, si me aburro, o tengo calor, estoy al lado de casa y de la piscina. Para llegar a 10kms hay que dar 13 vueltas ¡Qué coñazo!
Me paso un rato por la piscina y comemos en casita. Después nos acercamos al colegio de Sandra, que es muy molón para entregar la solicitud de su curso y de paso nos damos una vuelta por sus instalaciones, que están vacías ahora que no hay cursos. Bueno vacías no, porque están infestadas de cuervos. Mira que hay cuervos aquí, increíble. Parece que el coche (de aquí) también está dando algún problemilla para arrancar, pero bueno, lo bueno de estar alquilado es que de averías nos olvidamos. Si nos pasa de nuevo, lo llevaremos a que lo revisen y nos den otro provisionalmente.
Luego, decidimos visitar a nuestro amigo oriental del DVDclub para coger otra peli. Ya empieza a conocernos y es bastante amigable. Nos pregunta por el fútbol y como buen oriental, se conoce a todos los jugadores de España. Eso sí, de Shakira no ha oído hablar (la relacionamos con Piqué). Curioso... Cogemos una peli que se llama Four Lions que nos parece un poco coñazo porque no le pillamos el punto al humor.
Bueno, y llegamos al día de hoy, que es en el que trato de ponerme al día y ya son las 12:00, ¡¡¡y no he bajado a Ada todavía!!!
¡Seguiremos informando!
El viernes pasado, que es el primer día que dejé sin contar, lo más destacable que hicimos fue ver el famosisísimo cartel de Hollywood. Aunque parezca increíble, todavía no lo habíamos visto, ni en el tiempo que llevábamos aquí y tampoco cuando estuvimos el verano pasado, así que ya teníamos ganas de quitarnos esta espinita. Además, en la peli de Rock of Ages, también aparece de forma notable, con lo que todavía nos incrementó el interés. Parece que los de Google Maps tampoco han estado, porque las indicaciones para llegar a él nos las dio mal. Con todo lo que nos costó verlo, la verdad es que cuando lo conseguimos ver por primera vez nos hizo bastante ilusión. Luego tratamos de acercarnos a él y lo máximo que conseguimos fue ir a una especie de mirador, en la que el cartel estaba relativamente cerca, pero no al lado y además, como siempre, se nos estaba haciendo de noche. Tendremos que repetir la visita para ver si lo vemos desde más cerca, pero ya sin prisa...
¡El cartel de Hollywood! |
El sábado, 23 de junio, jugaba España los cuartos de final de la Euro contra Francia. Lo vimos en casita Sandra y yo, con el habitual foro de whatsapp de futboleros. Ganó España, 2-0, bastante solvente y a semis. Increíble lo que ha cambiado el cuento con la selección... En toda mi vida no había visto jugar más que unas semifinales a España y en estos cuatro años, no ha faltado a ninguna. Creo que España no tuvo suerte en las grandes competiciones, y ahora se nos está haciendo un poco de justicia.
Tras el partido, como nuestra querida Ada no tenía pienso, nos fuimos a visitar el sitio que nos recomendó aquella locuela que relaté del día que operamos a la perra por primera vez, Global Pet Outlet.
La verdad que el sitio estaba muy bien, muy completo y con precios bastante buenos. ¡Gracias locuela!
Después de las compras, decidimos tomarnos el aperitivo en nuestro querido Tattle Tale, y como de aperitivo, ya hemos dicho que aquí nada, decidimos darnos el primer homenaje de comida basura, en el Jack in the Box, que lo tenemos cruzando la calle.
Tras una conversación un poco surrealista con la camarera que nos atiende en inglés, en la que nos pregunta si los españoles entendemos a los mexicanos (cuando hablan), cogemos unas hamburguesas para llevar a Camelot. Las hamburguesas están muy buenas, pero como en todo sitio de comida basura que se precie, estamos haciendo la digestión durante horas... y más horas.
Luego para acallar nuestras conciencias, bajamos un rato al gimnasio. Para finalizar el día decido visitar andando el CVS mientras bajo a Ada, para ver si me compro unas pastillas de leche de burra. Es tarde y ya ha cerrado :-(
El domingo, ya con la digestión de la hamburguesa terminada, medio veo el partido del día (Inglaterra - Italia) y tras una comida en casa, nos toca visitar un Home Depot. No lo he contado, pero, Sandra, que se está empezando a destacar por ser un poco rompilona, ayer se cargó la puerta de un armario, al cerrarla un poco (mucho) a lo bestia contra el saco de pienso, ha reventado las bisagras. En toda la casa hay un triste destornillador, así que hay ponerse manos a la obra para arreglar la puerta. Tras realizar las compras necesarias para reparar la puertecita nos volvemos a hacer el arreglo en cuestión.
Después decidimos dar una vuelta por Marina del Rey. Tras un paseito vespertino no muy largo por el paseo marítimo y el muelle, nos tomamos una cervecita en un bar bastante bullicioso de Venice, pero con buenos precios para lo que se tercia por aquí. Estamos bajo mínimos en la nevera y nos apañamos una cena con lo que podemos.
Llega el lunes ¡Hay que ir a la compra! Pero también hay que ir al veterinario. La mañana la dedico a seguir investigando si se puede llegar corriendo a la playa desde casa (y volver). Llego a la conclusión de que sí, pero que la carrera en cuestión será de unos 17 kms. Comparto el enlace de la carrera en donde se ve que me quedé como a 1,5 kms de la playa. Luego visitamos al Dr. Girgis, que con su peculiar inglés, nos dice que la perra va muy bien. Que sigamos con las friegas de carrillo y que volvamos la semana que viene.
Luego hacemos una comida tirando de no se qué existencias y por fin convenzo a Sandra de que necesitamos hacer compra. Vamos a un centro comercial nuevo, en el que de paso vamos a comprar un par de camisetas en Ross que es una tienda que nos han recomendado como barata rollo outlet. De hecho ya hemos estado antes en Culver City en otra pero en esa ocasión sólo compró Sandra. Me compro dos camisetas, una más para hacer deporte y unos calcetos y sí, ¡por fin llegamos al super!
Esta vez, para seguir probando, vamos a Ralphs, que lo hemos oído en la radio como que es muy barato. Hacemos la mega compra durante más de dos horas (esta vez nos gastamos más de 200$) pero por fin vamos a tener la nevera que no parezca un hospital robado. El balance de Ralphs es que está bien, pero no creemos que sea el más barato y no es el que más cerca nos pilla. Casi descartado.
Después para airearnos un poco, decidimos hacernos socios de un DVD club que hemos visto enfrente del veterinario, así que vamos dando un paseo con Ada hasta allí. El sitio lo lleva un oriental, que como no, es desconfiado y viendo que somos de fuera, nos pide un deposito para sacar pelis. Le decimos que sin problema y nos hacemos socios. Cogemos la de Safe House que no me acuerdo como se llamaba en español. Nos entretiene, pero no nos flipa (Por cierto, esta expresión, tiene probablemente su origen en 'flip out' que lo dicen bastante por aquí, que viene a ser 'volverse loco'. Es curioso que los primeros a los que se les oyó utilizarla era a los macarras. Tenemos unos jinchos de lo más internacional...)
El martes, Sandra está de antojitos y quiere comer pescado. La verdad es que aquí es difícil comerlo, ya que son unos flipaos (again) de la comida basura y de la carne, pero el pescado, para los acuarios.
Decidimos ir a Redondo Beach, que cuando estuvimos con Luis y Anj, nos enseñaron una pescadería. Aquí, los pescados, también hablan inglés, porque no hay ninguno reconocible (bueno, el salmón, el atún y el bacalao. De la lubina, dorada, merluza, pescadilla... ni rastro). Compramos uno que nos parece que tiene buena pinta y que el pescadero también nos recomienda, un Striped Bass, que debe ser pariente lejano de la Lubina.
Tras una cervecita por la zona, también en el mismo bar que conocíamos de los 88 grifos de cerveza, vamos a casa a cocinar el pescadito al horno. La verdad es que nos supo bueno. Era una extraña mezcla de dorada y trucha, pero estaba rico.
¡Striped Seabass al horno! |
Por la tarde, me acerco a Sprouts a comprar cervezas y vino, que al día siguiente vamos a ver el partido de España en casa de Luis y luego voy a devolver la peli. Sandra mientras tanto, se ha ido a hacerse unas fotos para su curso de inglés que lo empieza la semana siguiente.
Llegamos al miércoles, día marcado por la semifinal de España contra Portugal. Subidón total cuando pasamos a la final, la tercera en cuatro años. ¡¡Increíbleeeeee!! Nos quedamos de barbacoa en casa de Luis y Anj y claro, se nos va un poco de las manos con la alegría, así que allí se nos hace de noche, speaking (a bad) english y vuelta a casa.
La noche la pasamos un poco regular y la mañana un poco resacosa, pero lo peor es la noticia de que la avería del coche de España, van a ser 600€, porque se le han roto cuarenta cosas ¡Joder! Bueno, está claro que desde el punto de vista económico, he arrancado un poco gafado. Hace un poco de calor y como tengo un poco de mal cuerpo, decido dar una carrera dando vueltas por el parque de Fox Hills, que como está enfrente, si me aburro, o tengo calor, estoy al lado de casa y de la piscina. Para llegar a 10kms hay que dar 13 vueltas ¡Qué coñazo!
Me paso un rato por la piscina y comemos en casita. Después nos acercamos al colegio de Sandra, que es muy molón para entregar la solicitud de su curso y de paso nos damos una vuelta por sus instalaciones, que están vacías ahora que no hay cursos. Bueno vacías no, porque están infestadas de cuervos. Mira que hay cuervos aquí, increíble. Parece que el coche (de aquí) también está dando algún problemilla para arrancar, pero bueno, lo bueno de estar alquilado es que de averías nos olvidamos. Si nos pasa de nuevo, lo llevaremos a que lo revisen y nos den otro provisionalmente.
Luego, decidimos visitar a nuestro amigo oriental del DVDclub para coger otra peli. Ya empieza a conocernos y es bastante amigable. Nos pregunta por el fútbol y como buen oriental, se conoce a todos los jugadores de España. Eso sí, de Shakira no ha oído hablar (la relacionamos con Piqué). Curioso... Cogemos una peli que se llama Four Lions que nos parece un poco coñazo porque no le pillamos el punto al humor.
Bueno, y llegamos al día de hoy, que es en el que trato de ponerme al día y ya son las 12:00, ¡¡¡y no he bajado a Ada todavía!!!
¡Seguiremos informando!